WEBINAR. CIRUGIA PLASTICA

Cirugía Menor en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora

Estás invitado al 2º Congreso de Avances y Técnica en Cirugía Menor del 25 y 26 de Enero, donde diversos profesionales en el ámbito profesional de la cirugía compartirán sus conocimientos sobre Cirugía Menor en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora. Únete para conocer los aspectos más relevantes sobre la Cirugía Plástica, Estética y Reparadora, una especialidad en auge que busca corregir alteraciones estéticas y funcionales para una mayor armonía facial y corporal.

Acompáñanos para aprender sobre estas y otras cuestiones durante el congreso sanitario que se llevará a cabo los días 25 y 26 de Enero en el 2º Congreso de Avances y Técnica en Cirugía Menor.

 

Dr. Manuel Robustillo Rego – Lesiones cutáneas en Cirugía Plástica

El Dr. Carlos Gómez González, licenciado en Medicina, trabaja como cirujano plástico, estético y reparador en el Hospital Universitario 12 de Octubre (Madrid), además de practicante privado. Dada su experiencia, nos expondrá para el 2º Congreso de Avances y Técnica en Cirugía Menor las bases de la intervención de lesiones cutáneas en cirugía plástica, cuya escisión se presenta aconsejable cuando se presenta en zonas localizadas.

Entre las lesiones cutáneas más destacadas se encuentran: quistes, lunares o nevus, pecas, cicatrices, quemaduras, etc. Estas lesiones pueden aparecer por diversos motivos, pero su presencia en ocasiones suscita consternación entre las personas. Por ello, se aconseja la escisión de la lesión por parte del cirujano plástico, ofreciendo unos resultados precisos caracterizados por restos prácticamente imperceptibles.

 

Dr. Vicente Camino Cinto – Cicatrización óptima en Cirugía Menor

El Dr. Vicente Camino Cinto, licenciado en Medicina, trabaja como Cirujano plástico, estético y reparador en Hospital Universitario Son Espases y en práctica privada (Palma de Mallorca). Durante el 2º Congreso de Avances y Técnica en Cirugía Menor, el Dr. Vicente hará uso experiencia en la profesión para hablarnos sobre la óptima cicatrización en la Cirugía Menor, un indicador directo de la calidad durante el procedimiento quirúrgico.  

Las cicatrices son las secuelas que deja toda cirugía menor, por lo que, un control correcto de las mismas, así como aprender a minimizar su impacto, constituye un pilar fundamental dentro de la cirugía menor. Tras una intervención, se busca que la cicatriz generada sea lo más estética posible. En esta ponencia hablaremos acerca de los factores implicados en la cicatrización (higiene, fotoprotección, hidratación, nutrición…), de qué depende que haya una buena cicatriz, la prevención de las cicatrices inestéticas y patológicas así como su tratamiento.

 

Mª Dolores Pérez Sancho – Camuflaje de Secuelas de Cirugías Estéticas y Creación de Areolas con Dermopigmentación

Mª Dolores Pérez Sancho, graduada en Enfermería, trabaja como enfermera especialista en dermopigmentación reconstructiva y oncológica en la Clínica Corachán, el Centro Sanitario Bermejo-Pérez, el Centro Formación Pretty Clinic y la Universidad Europea. En esta ponencia, Mª Dolores hará uso de su amplia experiencia en el sector para hablarnos en el 2º Congreso de Avances y Técnica en Cirugía Menor, sobre el camuflaje de secuelas de Cirugías Estéticas y Creación de Areolas con Dermopigmentación. Acompáñanos para aprender sobre la dermopigmentación y todas sus vertientes.

La dermopigmentación tiene varias vertientes, la más conocida es a nivel puramente estético, también conocida como maquillaje semipermanente. Las otras vertientes son la reconstructiva y oncológica, con ellas, podemos crear ópticamente areolas hiperrealistas en pacientes afectadas de cáncer de mama, y camuflar secuelas de intervenciones quirúrgicas, accidentes, quemaduras, etc. Así como crear ópticamente pelo, esta última técnica se conoce como tricopigmentación.

 

Todo esto y mucho más en la 2º Congreso de Avances y Técnica en Cirugía Menor

Acompáñanos para conocerlo todo sobre la Cirugía Plástica, Estética y Reparadora, una intervención que va mucho más de lo físico, permitiendo recuperar la autoestima, el equilibro emocional y el bienestar físico del paciente.

Esperamos tu asistencia en el congreso sanitario que se llevará a cabo el día 25 y 26 de Enero en el 2º Congreso de Avances y Técnica en Cirugía Menor.

Manejo del instrumental en cirugía menor.

Manejo del instrumental en cirugía menor

Continuamos con una nueva entrada de nuestro blog sobre cirugía menor. Como siempre os recordamos que si queréis profundizar en esta materia podéis realizar algunos cursos online más específicos sobre cirugía menor y suturas.

En este caso abordaremos el manejo de alguno de los instrumentos básicos de un kit de cirugía menor o kit de sutura: bisturí, tijeras, pinzas de disección y portaagujas.

Bisturí

Cuando pensamos en cirugía el primer instrumental que nos viene a la cabeza es un bisturí o escalpelo. A veces se utilizan ambos términos indistintamente, aunque la principal diferencia está en que el bisturí suele emplear hojas desechables, mientras que el escalpelo es de hoja fija y reutilizable.

Como sabéis este instrumento se usa para hacer cortes con precisión y separar los. Para coger el bisturí o escalpelo, lo sujetaremos entre el pulgar y el corazón, y con el índice en la base de la hoja de corte, para controlar la presión que realizamos (igual que cogemos un cuchillo de mesa). Sin embargo, para un corte de mayor precisión o punción pequeña, podemos coger el bisturí como si fuera un lápiz, apoyando la muñeca y el meñique sobre una base.

A la hora de cortar con este instrumento, es preciso empujar la hoja por la zona que queremos cortar, pero sin hacer demasiada presión, para evitar daños excesivos ni hacer un corte no controlado.

Es fundamental planear bien el corte antes de realizarlo, valorando bien la situación, incluso pintando sobre la piel el trazado que debe tener, y practicándolo en el aire antes de ejecutarlo.

Tijeras

Existen varios tipos de tijeras quirúrgicas según la forma de la punta (redondeada o afilada) y las hojas, que pueden ser curvas, rectas o anguladas, aunque la mayoría de las que se usan en cirugía menor son de punta redondeada.

Aunque todos sabemos cómo se deben coger unas tijeras, conviene dar unas indicaciones al respecto. Deberemos insertar la primera falange del pulgar por uno de los orificios para controlar la hoja que se mueve, mientras que en el otro orificio se introduce la segunda falange del anular. Para estabilizarla la tijera, rodeamos el mango con el corazón y meñique, y colocamos la punta del dedo índice en la bisagra.

Una de las más habituales y que nunca pueden faltar en nuestro kit de cirugía son las tijeras de Mayo, que tienen punta redondeada y unas hojas que no se separan, por lo que suelen ser idóneas para prácticamente todos los cortes.

Dependiendo de la dirección del corte, podemos utilizar las tijeras (normalmente cortamos con ellas desde la zona proximal a la distal) o el bisturí (habitualmente lo usamos para cortar desde la zona distal a la proximal). En el caso de hacer un corte transversal, haremos el corte desde el lado dominante al no dominante (de derecha a izquierda en el caso de que seamos diestros). Si necesitamos hacer un corte del lado no dominante al dominante podemos usar un bisturí, cambiar el lado de la mesa quirúrgica o girar las tijeras en la mano dominante (haciendo que la punta mire hacia el codo). Esta última postura es algo más compleja de explicar en esta entrada, por lo que os recomendamos que para ampliar información sobre el corte con tijeras, los distintos tipos de tijeras y otras particularidades consultéis un manual más detallado o realicéis un curso online de cirugía menor y suturas.

Pinzas de disección

Continuamos con otro de los instrumentos básicos de nuestro kit de cirugía menor o kit de sutura como son las pinzas de disección, una herramienta de gran utilidad y con diversas funciones en cirugía menor. Este tipo de pinzas sujetan objetos o tejidos al apretarlas entre los dedos y el pulgar.

Al igual que con las tijeras, existen distintos tipos de pinzas (con diversas formas de punta, con dientes o sin dientes…) y tamaños (grandes y fuertes para sujetar tejidos, o pequeñas y finas par microcirugía).  Las pinzas con dientes se emplean más en la sujeción de tejidos duros y resbaladizos, mientras que las pinzas sin dientes se emplean para manejar vasos o tejidos más delicados.

Normalmente será la mano no dominante la que maneje las pinzas, mientras que con la mano dominante manejaremos otros instrumentos, como las tijeras o el bisturí.

Además de la manera habitual de sujetar las pinzas (entre el pulgar y el índice y corazón), podemos sujetarlas con la palma (agarrando con el anular y el meñique) para liberar el resto de dedos (por ejemplo en el caso de tener que hacer nudos).

 

Portaagujas o Porta

Se trata de un instrumento muy similar a unas tijeras, pero cuya finalidad no es otra que sujetar la aguja cuando se hace una sutura de una herida, así se evita el contacto de con la piel del cirujano, para evitar la transmisión de infecciones. Este es otro de los instrumentos que no puede faltar en nuestro kit de sutura.

Normalmente son rectos y permiten el giro de la mano hacia arriba y abajo para introducir la aguja en los tejidos siguiendo una trayectoria curva. Al igual que en el caso de las tijeras, existen muchos tipos de portas, aunque el modelo Mayo es el más sencillo y de los más empleados. También existen portas de mango largo que se utilizan en el caso de tener que dar puntos en una herida profunda.

Su manejo es muy similar al de las tijeras, introduciendo el dedo pulgar en uno de los anillos, y anular en el otro. También es muy útil sujetarlo con la palma de la mano, sacando el dedo pulgar de su orificio, orientando la punta hacia arriba, o bien girarlo y apuntar la punta hacia el codo.

Como os aconsejamos también en las anteriores entradas, podéis encontrar información más detallada sobre estos procedimientos e instrumental en un manual o en cursos online de cirugía menor.

Detalles técnicos en cirugía menor y abordaje en suturas

Detalles técnicos en cirugía menor y abordaje en suturas

En esta nueva entrada en nuestro blog vamos a continuar desgranando los principales aspectos sobre la cirugía menor.

En este caso profundizaremos sobre la técnica y ayuda en las operaciones. No debemos olvidar que en este blog iremos exponiendo una visión general sobre este tema, con las recomendaciones más importantes sobre las técnicas de cirugía menor y los elementos imprescindibles que deben conformar nuestro kit de cirugía menor. Para seguir profundizando con más detalle en estos aspectos, nuestra recomendación es recurrir a cursos online de cirugía menor y suturas.

Cuando nos referimos al concepto de “técnica” en cirugía menor estamos hablando de la habilidad del cirujano para realizar su tarea de la forma más precisa posible.

Podemos decir que muchos cirujanos nacen con esta habilidad innata para la cirugía, pero no olvidemos que una buena técnica no puede alcanzarse sin una gran concentración y, sobre todo, sin una adecuada práctica y entrenamiento constantes.

No menos importante para alcanzar una adecuada técnica en cirugía menor es el acompañamiento, la supervisión e incluso la corrección que se lleva a cabo por parte de un profesor u otro colega con más experiencia en este campo. No debemos dejar escapar la oportunidad de pedirle a otro cirujano o profesor que nos observe en nuestra técnica, nos supervise y nos dé su punto de vista. Debemos saber aprovechar la experiencia acumulada por ellos e incorporar sus consejos en nuestra tarea de aprendizaje.

Es obvio que una adecuada técnica, además del entrenamiento, concentración y habilidad para desarrollarla, necesita un adecuado instrumental. Un buen kit de cirugía menor y sutura que esté siempre a punto y en perfectas condiciones nos ayudará a desarrollarla cirugía con éxito.

Otro de los aspectos que queremos destacar para lograr el éxito en cirugía menor es la adquisición de lo que podríamos llamar unos patrones automáticos de movimiento. Nos referimos a todas aquellas destrezas y habilidades que podemos realizar casi sin pensarlas porque se han adquirido a lo largo del tiempo a través del entrenamiento y la repetición. Si tomamos como ejemplo un músico que ejecuta una pieza, es obvio que al principio de su formación este músico debía pensar en cómo coordinar ambas manos, cómo cambiar la postura de cada uno de sus dedos, cómo debía mantener su vista fija en la partitura… Esto que al principio es muy difícil de coordinar y que requiere de la máxima atención, con el paso del tiempo se interioriza y ejecuta a nivel cerebral de tal manera que se puede realizar de forma automática, sin tener que pensarlo.

En cirugía menor debemos ser capaces de adquirir estos patrones de movimiento en la técnica quirúrgica y para ello es imprescindible la práctica y la repetición. Es necesario aprender a manipular cada una de las piezas de nuestro kit de cirugía menor como si una extensión de nuestras manos se tratara. Ciertas técnicas de cirugía, como por ejemplo la realización de nudos, debemos ser capaces de realizarlos de forma automática.

La importancia de estos automatismos radica en que nos permitirán concentraros en otros aspectos que verdad requieran de toda nuestra atención, como por ejemplo las decisiones que deberemos ir tomando a lo largo de nuestra intervención.

Y si importante es la técnica en cirugía menor, no menos importante es la ayuda en las operaciones. Se necesita la participación y cooperación de todos los miembros del equipo, ya que existen varias tareas a realizar al mismo tiempo, y una persona sola no puede hacerlas de forma adecuada.

Al igual que antes recomendábamos la participación de un profesor o cirujano experto que pueda supervisar nuestra tarea, ahora recomendamos que nosotros mismos participemos como ayudantes de otros cirujanos experimentados. Ambas experiencias son necesarias y nos ayudarán a convertirnos en profesionales altamente cualificados.

Si somos nosotros los que participamos como ayudantes, es obvio que previamente debemos estudiar a fondo la técnica a realizar así como la patología objeto de la cirugía. Una vez en la intervención, debemos agudizar al máximo nuestros sentidos y observar cada detalle, cada maniobra y cada técnica, buscando el momento adecuado para preguntar sobre ellas si es necesario.

Nuestro papel si participamos como ayudantes no solo será el de atender las peticiones de ayuda o consejo del cirujano principal, sino que incluso debemos ser capaz de anticiparnos y avisarle de algún posible error que creemos que puede cometer. Debemos encontrar la manera de advertirle con honestidad sobre este error y expresarle nuestro punto de vista, aun siendo conscientes de que la responsabilidad última la tiene este cirujano principal.

Incluso puede ser que durante la cirugía se nos pida que realicemos nosotros parte de la intervención. No debemos desaprovechar este momento de aprendizaje, por lo que siempre debemos estar preparados, habiendo entrenado previamente las técnicas básicas de cirugía menor, por ejemplo la realización de nudos, así como el manejo de los elementos de nuestro kit de sutura.

Conforme vamos adquiriendo mayor experiencia y habilidad en estas técnicas de cirugía menor, mayor será el grado de responsabilidad que vayamos adquiriendo, y cada vez se nos pedirá una colaboración más importante. Hasta tal punto que con el paso del tiempo se nos tratará de igual a igual por parte del cirujano principal, y nuestras opiniones serán valoradas para tomar una decisión final conjunta sobre la intervención. El intercambiar estas valoraciones y consensuar decisiones entre ambos cirujanos es también una forma de aprendizaje igual de importante que la que podemos adquirir en los manuales o cursos online de cirugía menor.

En próximas entradas abordaremos otros detalles como el manejo del instrumental básico de nuestro kit de suturas y kit de cirugía menor.

Actitud y afrontamiento en Cirugia Menor

Actitud y afrontamiento en cirugía menor.

En esta ocasión tratamos uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta en cirugía menor: cómo afrontamos. nosotros mismos la cirugía a nivel físico y mental o, dicho de otra forma, cómo influye nuestra actitud personal ante la cirugía. Es muy importante mantenernos en condiciones adecuadas a nivel físico y mental si queremos alcanzar el éxito en nuestra tarea, ya sea a la hora de hacer la cirugía, el cierre de incisiones, el abordaje de la herida o la técnica de sutura. Por eso en esta primera entrada aún no abordaremos aspectos de tipo técnico, sino que nos centraremos en nuestra actitud mental, nuestra actitud física y en nuestras manos, resaltando la importancia de la estabilidad de las mismas. El uso de los diferentes instrumentales de un kit de cirugía menor lo dejaremos para otra ocasión.

Nuestra actitud mental:

Por supuesto que para lograr el éxito en la cirugía debemos realizar una técnica precisa con un adecuado kit de sutura, pero necesariamente esta técnica debe ir acompañada de una correcta toma de decisiones. Se debe tener en todo momento el control de la situación. Antes de avanzar al paso siguiente debemos hacer un “cheklist” mental para asegurarnos de que todo va bien y que podemos continuar. Para esto es muy útil los cursos online de cirugía menor y suturas, que de una manera sencilla y cómoda nos permiten formarnos en cirugía menor.

Incluso debemos tener previsto que pueden surgir complicaciones y aspectos inesperados que nos pueden obligar adaptar nuestro trabajo y a hacer pequeñas variaciones respecto a lo que teníamos previsto. Esto también debe estar en nuestra cabeza…siempre, en todo momento, hay que mantener la calma ante estas situaciones.

No olvidemos tampoco que esto es una tarea en equipo, y que contamos con un grupo de profesionales a nuestro alrededor con el que podemos y debemos hablar sobre estas situaciones inesperadas, esto nos ayudará seguro a tomar la siguiente decisión y a poder explicarla en caso necesario.

Esta adaptación a las nuevas situaciones que puedan surgir no significa para nada que se deban olvidar los objetivos de nuestra intervención, la meta que debemos conseguir. Es igual que cuando pretendemos hacer un viaje hasta un determinado lugar, no importa si por el camino encontramos una carretera cortada y debemos tomar un desvío, lo importante es llegar a nuestro destino.

Nuestra actitud física

Cuando hablamos de actitud física no nos referimos sólo a estar “en forma” (que también es importante) sino a cómo afrontamos física y espacialmente la cirugía que estamos realizando. La organización del campo físico es fundamental, en este sentido podemos, si es necesario, cambiar nuestra postura y la del paciente buscando una mayor comodidad. Esto repercutirá en el éxito de la intervención.

En este sentido nos referimos también a algunos procedimientos y técnicas que requieren una actitud física o una forma de realización concreta. Es el caso por ejemplo de los procedimientos de corte con el bisturí o con tijeras, o algunos procedimientos que se deben realizar en posiciones especialmente complicadas. A esto nos referimos cuando hablamos de actitud física, al hecho de tener que estar especialmente atentos y no dar por hecho que todo va a ser un procedimiento fácil.

Nuestras manos y su estabilidad.

Cualquier mano es apta para realizar un procedimiento de cirugía menor, todas tienen la capacidad manipulativa que se requiere para ello. No obstante, cada mano tiene sus particularidades, ya sea por ejemplo por la longitud de los dedos o la forma de la falange o de la uña.  También influirá las dimensiones de los instrumentos del kit de sutura, pudiendo estos variar en tamaño de forma importante. 

Tan importante es el conocimiento de nuestras manos como el uso adecuado de los guantes. Sería un error por ejemplo utilizar un guante de tamaño incorrecto (grande o pequeño), que no nos permitan mover los dedos de forma adecuada.

Cuando hablamos de las manos, es imprescindible hacer mención al concepto de estabilidad. Cuando el brazo y los dedos están extendidos, todas las personas presentamos algún grado de temblor, más aún si sujetamos un instrumento.

Es necesario conocer esta inestabilidad y aprender a controlarla, usando algunos pequeños consejos que os comentamos a continuación:

  • Usaremos una base firme lo más próxima al punto donde debemos realizar nuestra acción.
  • Podemos apoyar los codos a cada lado del cuerpo o en una mesa, o procurar estar sentado o apoyado para aumentar nuestra estabilidad.
  • También podemos apoyar los codos, el talón de la mano o el meñique sobre una mesa.
  • Incluso puede utilizar la otra mano para ayudar a tener mayor estabilidad en la mano que ejerce la acción de la cirugía, (por ejemplo puede apoyar instrumental sobre los dedos de la otra mano, cogerse una mano con la otra a nivel de la muñeca, o enfrentar las dos manos por el dedo pulgar de forma paralela, por ejemplo en el caso de tener que enhebrar una aguja).

Una vez que hemos planteado esta visión general sobre nuestra actitud personal a la hora de abordar la cirugía menor, continuaremos en las próximas entradas con detalles técnicos y el manejo del instrumental de cualquier kit de cirugía menor.

Suturas curso

MATERIALES EN UN KIT DE CIRUGÍA MENOR

Como ya hemos visto en otros artículos, denominamos cirugía menor a un conjunto de técnicas quirúrgicas, de corta duración, que suelen emplearse en los tejidos más superficiales. Normalmente requieren de anestesia local y son bastante sencillos de realizar.

Para llevar a cabo la cirugía menor, el médico debe tener a su disposición los instrumentos necesarios y el conocimiento de cómo utilizarlos, siempre guiándose con criterios científicos. Los materiales necesarios en un kit de cirugía menor son los siguientes que vamos a comentar.

PORTAAGUJAS

Este instrumento se utiliza única y exclusivamente para realizar suturas con agujas y tener una mayor precisión y seguridad. Lo habitual es disponer de uno estándar que pueda manejar distintos tamaños de agujas, es recomendable que no sean extremadamente largos.

BISTURÍ O ESCALPELO

Pueden denominarse de distintas formas dentro del mundo sanitario, también se les conoce como lanceta o cuchillo de cirujano. Normalmente es un cuchillo de tamaño pequeño, con una punta y una hoja muy fina. Suele emplearse para realizar una incisión en la superficie cutánea y en la cirugía menor son desechables de un sólo uso. Se divide en dos partes, un mango y una hoja, la cual puede ser modificada según la necesidad, pues hay varios tipos dependiendo de la forma de la hoja y su tamaño. Una de las ventajas de este instrumento es la precisión de sus cortes sobre el tejido.

TIJERAS

Son bastante útiles porque permiten realizar cortes en los tejidos y en los materiales quirúrgicos, como el hilo de la sutura. Es importante distinguir entre las que son tijeras de corte de material y las tijeras de disección. Estas últimas no se emplean para el corte de materiales y se utilizan de forma especial.

PINZAS

Suelen haber dos tipos: hemostasia y disección. Las primeras son pinzas de mosquito curvas sin dientes, que se emplean para la tracción de los tejidos, produciendo así la hemostasia. Las segundas, de disección, pueden tener dientes o no, y se emplean para manejar el tejido superficial, además de retirar los puntos de sutura.

SEPARADORES

Aportan bastante ayuda para exponer el campo que se va a tratar mediante la separación de los bordes de la herida. Hay varios tipos de separadores, pero nosotros recomendamos el de doble uso o Senn-Mueller. Es realmente necesario disponer de un separador en el kit de cirugía menor para cualquier tipo de sutura o técnica quirúrgica.

Recordamos la importancia de actualizarse en las nuevas técnicas y materiales que van surgiendo. Por este motivo, ponemos a tu disposición nuestro curso en cirugía menor online en el que además puedes hacerte con uno de nuestros kits de cirugía menor. ¿A qué es interesante? No esperes más, en Curso de Cirugía Menor miramos por ti y por tu formación.

LA CIRUGIA MENOR: EL TERRITORIO SIN EXPLORAR PARA ENFERMERÍA

LA CIRUGIA MENOR: EL TERRITORIO SIN EXPLORAR PARA ENFERMERÍA

En la práctica profesional de enfermería, realizar una sutura está a la orden del día. Sin embargo, ¿porqué asusta tanto a la mayoría de los profesionales realizar una sutura o cualquier otro procedimiento de cirugía menor?

Hoy os exponemos algunos de los motivos que más asustan a los profesionales de enfermería. Además, os ayudamos a resolver vuestras dudas, para poder familiarizaos más con este mundillo.

            “Es competencia del médico”: Ésta falsa creencia limita a un gran número de profesionales. Según el Real Decreto 63/1995, de 20 enero sobre Ordenación de Prestaciones (Publicado el 10 de febrero de 1995 en el BOE núm. 35 [pág. 4538], “la cirugía menor se encuentra incluida en España como prestación sanitaria del SNS en el ámbito de Atención Primaria” desde dicho año, por tanto, se trata de una tarea compartida con el colectivo médico, pero no exclusiva del médico.

Los profesionales de enfermería están totalmente capacitados para formarse en cirugía menor, y llevar a cabo los procedimientos que acontecen en la práctica habitual, independientemente de que surjan circunstancias adversas que requieran valoración médica o derivación a un procedimiento de mayor complejidad, en este caso, tarea del médico.

            ”¿Y si dejo una cicatriz fea?”: La cirugía menor no es más que una técnica que requiere formación teórica y sobre todo práctica. Durante la formación en cirugía, se aprende a solucionar las complicaciones evitables que puedan ir surgiendo, cómo, por ejemplo, realizar un buen anudado, escoger el material idóneo para cada sutura o manejar posibles complicaciones como la infección de un punto de sutura.

Con todo esto, comprobaréis que, siendo observadores, las heridas nos van indicando prácticamente como debemos actuar, y veréis poco a poco lo gratificante que resulta conseguir un buen resultado estético y funcional tras una sutura bien realizada.

Closeup of surgery knives set isolated

MANEJAR EL INSTRUMENTAL DE CIRUGÍA MENOR

            “Me parece muy difícil manejar el instrumental o me pone nervios@ realizar esas tareas”: Seguramente, la primera vez que montasteis en bicicleta, condujisteis un coche o sacasteis una muestra sanguínea, no lo hicisteis con la misma soltura que la vez número 100. Es normal, realizar algún procedimiento nuevo nos produce nerviosismo hasta que no sentimos que lo controlamos. Como os decíamos anteriormente, la cirugía menor es práctica, práctica y más práctica. Recordad que nadie nace enseñado, todos hemos sido aprendices, y que, con práctica, todo se consigue.

Además, contáis con numerosas herramientas para aprender o perfeccionar vuestra técnica; desde libros y manuales de cirugía menor, hasta cursos presenciales eminentemente prácticos o cursos online, tutorizados y con videos que ilustren gráficamente cada técnica para que podáis visualizarlos y repasar cuando lo deseéis.

Os animamos a que os adentréis en el universo de la cirugía menor.  Ponemos a vuestra disposición todos nuestras herramientas de enseñanza, virtuales y presenciales, para que mejoréis vuestro currículum y sobre todo, seáis profesionales más competentes, capaces de defenderse ante cualquier situación clínica relacionada con procedimientos de cirugía menor.

BIBLIOGRAFÍA

La cirugía menor se encuentra incluida en España como prestación sanitaria del SNS en el ámbito de Atención Primaria desde 1995 (RD 63/1995 sobre ordenación de prestaciones) (3) apareciendo definida en la cartera de servicios de Atención Primaria desde el año 200.

Real Decreto 63/1995, de 20 enero, MINISTERIO SANIDAD Y CONSUMO, BOE 10 febrero 1995, núm. 35 [pág. 4538].

Dominguez, F. et al. Cirugía Menor. Desarrollo de Nuevas competencias Enfermeras. Conserjería de Salud. Junta de Andalucía.