A continuación se anotan una serie de principios de la cirugía y de la técnica quirúrgica sin guardar un orden de importancia ni una temática en particular. Se trata simplemente de un listado que el cirujano principiante debe conocer y que el cirujano formado debe recordar. En nuestros cursos de cirugía menor intentamos transmitir, entre otros, estos valores. Porque estamos convencidos que el éxito de cualquier procedimiento quirúrgico, por sencillo que sea, depende de que se cumplan.

• Practicar la ética de la cotidianeidad, que consiste en repetir y repasar cotidianamente los principios y los actos (con buena disposición) para madurarlos y alcanzar los objetivos fijados. Hacer los movimientos bien y rápido, sobre todo bien. Hoy en día es muy fácil ayudarnos de plataformas de vídeos como «Youtube» y adquirir el instrumental básico para practicar en casa.
• Buscar técnicas alternativas para el laborioso aprendizaje de la técnica quirúrgica. Por eso es importante los cursos en materias como la cirugía, porque el adquirir la técnica y perfeccionar la misma se deben de realizar primero fuera del paciente.
• Evitar la falta de actualización en el tratamiento quirúrgico que se manifestaría por un estancamiento académico. Nada más que hay que ver el desconocimiento que existe actualmente en la mayoría de sanitarios sobre temas tan básicos y tan prevalentes como son los apósitos para las úlceras.
•  Promover la evolución racional de la técnica quirúrgica en busca de eficacia, simpleza y rapidez. Porque si algo se puede hacer bien y rápido, aunque para eso uno tiene que dedicar tiempo a perfeccionar su técnica.
• Prever todas las posibilidades técnicas y los movimientos antes de la operación. Siempre tenemos que saber a donde vamos cuando realicemos cualquier procedimiento quirúrgico, cuando estemos cerrando cualquier herida… Y al mismo tiempo estar preparados para cambiar esa hoja de ruta cuando surjan imprevistos.

AJFL