En esta nueva entrada en nuestro blog vamos a continuar desgranando los principales aspectos sobre la cirugía menor.
En este caso profundizaremos sobre la técnica y ayuda en las operaciones. No debemos olvidar que en este blog iremos exponiendo una visión general sobre este tema, con las recomendaciones más importantes sobre las técnicas de cirugía menor y los elementos imprescindibles que deben conformar nuestro kit de cirugía menor. Para seguir profundizando con más detalle en estos aspectos, nuestra recomendación es recurrir a cursos online de cirugía menor y suturas.
Cuando nos referimos al concepto de “técnica” en cirugía menor estamos hablando de la habilidad del cirujano para realizar su tarea de la forma más precisa posible.
Podemos decir que muchos cirujanos nacen con esta habilidad innata para la cirugía, pero no olvidemos que una buena técnica no puede alcanzarse sin una gran concentración y, sobre todo, sin una adecuada práctica y entrenamiento constantes.
No menos importante para alcanzar una adecuada técnica en cirugía menor es el acompañamiento, la supervisión e incluso la corrección que se lleva a cabo por parte de un profesor u otro colega con más experiencia en este campo. No debemos dejar escapar la oportunidad de pedirle a otro cirujano o profesor que nos observe en nuestra técnica, nos supervise y nos dé su punto de vista. Debemos saber aprovechar la experiencia acumulada por ellos e incorporar sus consejos en nuestra tarea de aprendizaje.
Es obvio que una adecuada técnica, además del entrenamiento, concentración y habilidad para desarrollarla, necesita un adecuado instrumental. Un buen kit de cirugía menor y sutura que esté siempre a punto y en perfectas condiciones nos ayudará a desarrollarla cirugía con éxito.
Otro de los aspectos que queremos destacar para lograr el éxito en cirugía menor es la adquisición de lo que podríamos llamar unos patrones automáticos de movimiento. Nos referimos a todas aquellas destrezas y habilidades que podemos realizar casi sin pensarlas porque se han adquirido a lo largo del tiempo a través del entrenamiento y la repetición. Si tomamos como ejemplo un músico que ejecuta una pieza, es obvio que al principio de su formación este músico debía pensar en cómo coordinar ambas manos, cómo cambiar la postura de cada uno de sus dedos, cómo debía mantener su vista fija en la partitura… Esto que al principio es muy difícil de coordinar y que requiere de la máxima atención, con el paso del tiempo se interioriza y ejecuta a nivel cerebral de tal manera que se puede realizar de forma automática, sin tener que pensarlo.
En cirugía menor debemos ser capaces de adquirir estos patrones de movimiento en la técnica quirúrgica y para ello es imprescindible la práctica y la repetición. Es necesario aprender a manipular cada una de las piezas de nuestro kit de cirugía menor como si una extensión de nuestras manos se tratara. Ciertas técnicas de cirugía, como por ejemplo la realización de nudos, debemos ser capaces de realizarlos de forma automática.
La importancia de estos automatismos radica en que nos permitirán concentraros en otros aspectos que verdad requieran de toda nuestra atención, como por ejemplo las decisiones que deberemos ir tomando a lo largo de nuestra intervención.
Y si importante es la técnica en cirugía menor, no menos importante es la ayuda en las operaciones. Se necesita la participación y cooperación de todos los miembros del equipo, ya que existen varias tareas a realizar al mismo tiempo, y una persona sola no puede hacerlas de forma adecuada.
Al igual que antes recomendábamos la participación de un profesor o cirujano experto que pueda supervisar nuestra tarea, ahora recomendamos que nosotros mismos participemos como ayudantes de otros cirujanos experimentados. Ambas experiencias son necesarias y nos ayudarán a convertirnos en profesionales altamente cualificados.
Si somos nosotros los que participamos como ayudantes, es obvio que previamente debemos estudiar a fondo la técnica a realizar así como la patología objeto de la cirugía. Una vez en la intervención, debemos agudizar al máximo nuestros sentidos y observar cada detalle, cada maniobra y cada técnica, buscando el momento adecuado para preguntar sobre ellas si es necesario.
Nuestro papel si participamos como ayudantes no solo será el de atender las peticiones de ayuda o consejo del cirujano principal, sino que incluso debemos ser capaz de anticiparnos y avisarle de algún posible error que creemos que puede cometer. Debemos encontrar la manera de advertirle con honestidad sobre este error y expresarle nuestro punto de vista, aun siendo conscientes de que la responsabilidad última la tiene este cirujano principal.
Incluso puede ser que durante la cirugía se nos pida que realicemos nosotros parte de la intervención. No debemos desaprovechar este momento de aprendizaje, por lo que siempre debemos estar preparados, habiendo entrenado previamente las técnicas básicas de cirugía menor, por ejemplo la realización de nudos, así como el manejo de los elementos de nuestro kit de sutura.
Conforme vamos adquiriendo mayor experiencia y habilidad en estas técnicas de cirugía menor, mayor será el grado de responsabilidad que vayamos adquiriendo, y cada vez se nos pedirá una colaboración más importante. Hasta tal punto que con el paso del tiempo se nos tratará de igual a igual por parte del cirujano principal, y nuestras opiniones serán valoradas para tomar una decisión final conjunta sobre la intervención. El intercambiar estas valoraciones y consensuar decisiones entre ambos cirujanos es también una forma de aprendizaje igual de importante que la que podemos adquirir en los manuales o cursos online de cirugía menor.
En próximas entradas abordaremos otros detalles como el manejo del instrumental básico de nuestro kit de suturas y kit de cirugía menor.